Leyendo una noticia sobre las amenazas que grupos armados han realizado sobre 402 alcaldías y 80 municipios en Colombia -diario El País de España
https://elpais.com/internacional/2019/09/05/colombia/1567692255_242483.html- de cara a las próximas elecciones locales, no he podido dejar de recordar las amenazas que en el movimiento de La Colombia Humana sufrieron varías personas que trabajaron cerca de mí en las elecciones presidenciales del año 2018.
Para alguien que lleva viviendo 24 años fuera de Colombia es impensable vivir este tipo de circunstancias en primera persona;
los secuestros de civiles, los asesinatos de testigos, las desapariciones forzosas, los asesinatos de líderes sociales, de candidatos políticos, del cura del pueblo y de la maestra de toda la vida -estos dos últimos casos sucedieron en Sincelejo, Sucre, no hace mucho tiempo- es algo que leo en los periódicos, escucho en la radio o lo veo en las noticias. El día que leí la carta que los denominados “Águilas Negras” le habían enviado a un compañero del equipo de comunicaciones del candidato Gustavo Petro en donde le decían que <<tuviera cuidado, pues sabían dónde vivía>>, me fui descompuesto al hotel, y vomité nada más llegar.
Si bien, de quien más me he acordado hoy al leer esta noticia es de Janice Buitrago Cely e Isabel Antolínez Leal: fundadoras del colectivo Los de a Pie con Petro -hoy transmutado o evolucionado a Los de a Pie-,
pues tuve la suerte de poder seguir de cerca el trabajo de estas dos valientes y osadas mujeres, a quienes constantemente solía decirles: <<tened mucho cuidado, recordad cuanta gente malvada hay a vuestro alrededor>>. Sus sonrisas inocentes y confiadas me arrugaban el corazón.
Día tras día, sin importarles el frío, el calor, el sol o el cansancio, Janice e Isabel, acompañadas de miembros de su colectivo -aglutinaban a más de 20 mil en todo el territorio nacional-
intentaban modificar conciencias; hacer llegar el programa de gobierno de la Colombia Humana; abrían sedes en barrios alejados del elegante barrio de Teusaquillo en donde estaba mi oficina o, simplemente, se iban a los Llanos Orientales -creo recordar que el viaje duró 22 horas ida y vuelta en autobús- a apoyar a los lideres locales de Los de a Pie con Petro; también recuerdo la precariedad económica con la que trabajaron, y el desprecio que sufrieron por parte de algunos “doctores” que pululaban por ahí. Ser de izquierda y querer que te llamen doctor, no es solo incompatible, sino que, demuestra una carencia total de ideología.
Para terminar, me gustaría honrar a todas esas “Janices” e “Isabeles” que trabajan día a día por sus convicciones, por sus ideales, por sus sueños.
El valor no es cosa baladí; poner en riesgo tu seguridad y la de los tuyos necesita de algo más que bravuconería y un equipo de escoltas. Nelson Mandela, Yasser Arafat y Mahatma Gandhi, por citar solo algunos, fueron también en su día tratados de terroristas, bandidos y criminales, y sus vidas amenazadas hasta el infinito; uno de ellos ganó el Nobel de la Paz y, los otros dos, recibieron los más altos honores que se le puedan otorgar a hombres buenos y pacíficos. La bondad sobrevivirá, y lo veremos todos.
Freddie Uribe Olivera
Ex asesor y estratega político de la Colombia Humana Petro Presidente 2018