Supongo que en el mundo en el que vivimos actualmente, la noticia de que <<un hombre y su hijo matan a una familia de osos mientras hibernan>> será algo baladí; solo hay que mirar a los refugiados sirios; a los líderes sociales y los indígenas asesinados en Colombia; el dolor inacabable del pueblo Palestino; el hambre y la miseria de África. Podría llenar esta página con muchos casos más y no tendría suficiente.
<<Quien disfruta con el dolor de un animal no puede ser buena persona>>
He leído que dijo alguien en alguna parte y estoy totalmente de acuerdo, pues, para generar sufrimiento tiene que haber algo o mucho de maldad. Los que amamos a los animales -y aquí me ciño a mi propia experiencia, a mi entorno social- tenemos tendencia a ser más solidarios, respetuosos y generosos. Nos gustan los niños, tenemos tiempo para ayudar a un anciano a un cruzar una calle y vivimos más felices; nos gusta alumbrar aquello que tocamos.
Noticias como esta -la muerte de la osa y sus oseznos- me causan una inmensa tristeza,
pero también ganas de que la justicia, de una vez por todas, imponga penas que ayuden a disuadir a los futuros maltratadores; asesinos de palomas . Parece que, lo que no nos toca no tiene porqué importarnos, a fin de cuentas <<bastante tenemos con nuestras cosas>>; no voy a decir que no es verdad. No obstante, si que podemos implicarnos, aunque sea en una pequeña medida e intentar cambiar las cosas; por nuestros hijos y los hijos de sus hijos. El egoísmo es un antivalor que adoptamos con asiduidad cuando queremos escapar de nuestras conciencias, si bien, no es más que un mal maquillaje que deja al descubierto nuestras miserias.
Desde hace un tiempo relativamente corto he empezado a seleccionar a mis amistades, incluida la parentela.
No quiero en mi universo emocional a racistas, homófobos, clasistas, radicales, patriotas, excluyentes, machistas, tacaños, maniáticos, manipuladores, mentirosos, calumniadores y, mucho menos, corruptos. Ese el triunfo de la libertad, pero, sobre todo, del valor a decidir sobre algo que solo nos atañe a nosotros; mejor solos que mal acompañados. Feliz miércoles.
Freddie Uribe